5 consejos para enseñar a leer a un niño con dislexia
Se acerca el día mundial de la dislexia y nos hace mucha ilusión compartir con vosotros el acuerdo de colaboración que hemos firmado con la Federación Española de Dislexia que recoge nuestro compromiso con las familias de niños con dislexia en España.
Como madres, cada una, de un niño con dislexia, hoy queremos compartir con vosotros nuestra experiencia personal y dejaros 5 consejos para enseñar a leer a un niño con Dislexia.
Cuando llegó la pandemia, Silvia y yo nos encontramos enfrentándonos con un problema muy parecido. Cada una desde su casa, se encontró con un niño con dificultades en la lectura. Nuestros hijos de primero de primaria, que habían nacido con una semana de diferencia, y que tantas cosas habían compartido juntos, volvían a tener algo en común: el rechazo a la lectura.
Desgraciadamente, aún estábamos lejos de recibir el diagnóstico de dislexia que nos ayudaría a entender a nuestros hijos y a poder ayudarles, y nos encontramos como tantos otros padres, intentando descifrar por nosotras mismas a qué se debían estas dificultades en la lectura: ¿Será que a mi hijo no le gusta leer? ¿será que no se esfuerza suficiente? ¿será que es un poco vago…?
La angustia de ver que tu hijo rechaza la lectura y no consigue leer esos 10 minutos que le piden en la escuela, de ver cómo confunde letras, se salta palabras, en definitiva, cómo lee a trompicones, con gran dificultad y falta de fluidez, no nos es ajena. Es algo que experimentamos las dos en primera persona durante los meses de mayor incertidumbre de la pandemia.
Múltiples veces hemos hablado de lo que cambiaríamos si volviéramos a tener que convertirnos en profesoras temporales de la noche a la mañana. Si hubiéramos podido aplicar todo lo que sabemos ahora, le hubiéramos ahorrado mucho sufrimiento y frustración a nuestros niños ¡y a nosotras mismas!
Uno de los retos a los que nos enfrentamos con los niños con dislexia, es conseguir que no rechacen los libros. Por eso, es importante separar los momentos de aprendizaje de la lectura (decodificación), de los momentos de lectura por placer (lectura en voz alta), en los que pueden relajarse y disfrutar, sin el esfuerzo de leer por sí mismos, y experimentar que los libros pueden ser una fuente de diversión y conocimiento.
Os dejamos 5 consejos para enseñar a leer a tu hijo con dislexia y no morir en el intento.
1. Leer en voz alta:
Lee a tu hijo en voz alta. No nos cansamos de repetir los beneficios de la lectura en voz alta para todos los niños, independientemente de si tienen o no dificultades con la lectura, y de lo indispensable que es para aquellos niños con dificultades.
Las dificultades con la lectura, empiezan siendo dificultades de decodificación para convertirse en dificultades de comprensión lectora, que se dan cuando los niños con dislexia no entienden lo que están leyendo por falta de vocabulario, de conocimiento general y de cultura o contexto. En definitiva, por falta de lectura.
A medida que los lectores más hábiles avanzan en sus lecturas, van adquiriendo todos esos conocimientos que les permiten leer textos cada vez más complejos. La brecha entre lectores hábiles y aquellos con dificultades se hace, por tanto, cada vez mayor.
Cuando lees en voz alta a tu hijo, le ayudas a desarrollar su vocabulario, a ampliar sus conocimiento y su cultura, y por tanto a evitar estos vacíos de conocimiento que le ayudarán a leer con mayor fluidez a medida que vaya avanzando en sus lecturas.
2. Lee tú primero el texto:
Selecciona el texto que va a leer el niño y léelo tú primero en voz alta. De ese modo le ayudarás a familiarizarse con las palabras difíciles que se va a encontrar y le resultará más fácil leer porque ha memorizado parte del texto, quedándose con una sensación de éxito y una buena dosis de autoestima tras su lectura.
Escuchar el texto antes de leerlo no es hacer trampas. Si tu hijo lo percibe así, puedes decirle que de este modo trabaja también la memoria, y por tanto se lleva dos aprendizajes en uno.
3. Lee con él:
Siéntate a leer con él. Pídele que siga con el dedo la lectura para ayudarle a quedarse en la línea que le corresponde y que no se pierda cuando te toque leer a ti. Ve alternando un párrafo cada uno, una línea cada uno, incluso una palabra cada uno. Cuando estés leyendo tú, pídele que siga con la mirada tu dedo, y vaya “leyendo” por dentro. Si se cansa, puedes seguir leyéndole tú hasta terminar el texto.
Lo importante es establecer una rutina de lectura compartida en pequeñas dosis, sin agobiar al niño y sin dejarlo agotado. Necesitarás mucha paciencia para ir ajustando tus expectativas cada día y adaptando el tiempo de lectura según el momento. Si puedes, introduce este tiempo de lectura a primera hora de la mañana, cuando el niño está más despejado y fresco.
4. Elección de libros adecuada:
Cuando pensemos en qué libros pueden interesar a nuestros hijos vayamos más allá de las novelas de primeros lectores y pensemos en las cosas les gustan. Os dejamos algunos ejemplos:
Los libros de chistes y adivinanzas son un pasatiempo de lo más divertido, perfecto para niños con sentido del humor. Se trata de lecturas breves y fáciles, de satisfacción inmediata, que pueden compartir con sus hermanos, amigos y con sus padres.
Busca libros informativos sobre temas que les interesen. El libro Guinness de los récords tiene mucho éxito entre los chicos y los libros de animales suelen ser una apuesta bastante segura.
Los cómics de primeros lectores como Super Patata o Policán son perfectos para combinar texto e ilustración, dándole un descanso a la mente. Además, leer las imágenes ¡también cuenta como leer!
Los libros de recetas son ideales para los más cocinitas y de paso les ayudarán a practicar conceptos básicos de matemáticas.
Si quieres más recomendaciones de libros, consulta nuestras listas de libros por edades donde encontrarás muchos de nuestros libros preferidos.
5. Audiolibros
Introduce el audiolibro en tu vida. Son perfectos para los viajes en coche, para poner de fondo mientras los niños juegan en su cuarto o para escuchar todos juntos durante la cena, recreando los tiempos en los que nuestros mayores escuchaban la radionovela en familia, antes de la era tecnológica.
La oferta de audiolibros infantiles y juveniles en español es un tanto limitada, aunque sabemos que las editoriales españolas están empezando a apostar por este formato. Os dejamos algunos audiolibros de libros muy populares entre lectores de primaria, donde podréis escuchar los primeros 15 minutos del libro de forma gratuita:
Los audiolibros son una excelente vía para que los niños con dislexia puedan formar parte de las conversaciones sobre libros entre sus compañeros. Si todos los niños están leyendo los libros de el Diario de Greg, y ellos lo ha escuchado en audiolibro, podrán participar como uno más con su opinión.
Si queréis libros en inglés, os recomendamos la plataforma Audible donde encontrareis una oferta infinita de libros infantiles y juveniles, entre clásicos y novedades, leídos por escritores como David Walliams y actores de primera línea como Kate Winslet.
Con los audiolibros se trabaja también la atención y la escucha activa y si optas por la plataforma Audible, el inglés.
¡Felices lecturas!
4 respuestas
¡Enhorabuena por la labor tan magnifica que haceis! Es una gozada leeros y escucharos.
Muchas gracias, Ruth.
Es estupendo lo bien explicado que está, eso de no dejar atrás a los niños con dificultades me parece fantástico .
Gracias. De eso se trata: todos los niños tienen derecho a disfrutar de los libros, independientemente de sus dificultades.